Orquesta Sinfónica UAEH “25 Años haciendo vibrar tus emociones”

Son ya 25 años, se dice fácil, pero lo cierto es que se trata de un sinfín de emociones que se expresan a través de la piel y que se alborotan dentro de los corazones.

La música es ese remedio que sirve para acompañar momentos de felicidad, de tristeza, de pasión, instantes de vida que se convierten en un por siempre y para siempre.

Y es que hablar de la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (OSUAEH) A.C., es traer a la mente una explosión de emociones, un todo conformado por individualidades y conciencias diversas que al unísono se trasforman para dejarnos contemplar un universo de posibilidades en cada una de sus interpretaciones.

“Sin música, la vida sería un error”, como lo escribió en su momento el notable filósofo alemán, Friedrich Nietzsche. Esa frase plasmada en una playera negra con letras en vinil blanco sirvió para recordarles a los músicos de la OSUAEH que viven para hacer música, y su público les agradece y les ovaciona cada que sucede algo musicalmente extraordinario en cada uno de los conciertos que brindan en el Aula Magna “Alfonso Cravioto Mejorada”.

A más de dos décadas la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo A.C. es una agrupación musical conformada por talentosos músicos con la experiencia para interpretar a los grandes genios del repertorio sinfónico, así como a los ilustres compositores de la música contemporánea.

Desde su primer concierto celebrado un 29 de agosto de 1997, bajo la batuta del famoso director mexicano Fernando Lozano, se abrió el escenario a lo más imprescindible, grandioso y magistral de la música sinfónica, con la fuerza y la energía que caracteriza a una persona que protagoniza el estreno de un proyecto cultural con larga vida.

La historia continúa con Román Revueltas, su espíritu multifacético y su talento heredado le permitió estar al frente de la agrupación universitaria haciendo eco del extraordinario viaje por el mundo que representa escuchar música sinfónica en un concierto en vivo.

Con el maestro Eduardo Álvarez se abrió un abanico de posibilidades con conciertos de la más alta exigencia técnica, fueron varias sus memorables interpretaciones. Una noche junto a un centenar de instrumentistas irrumpió en el escenario con la Obertura 1812 del ruso Piotr Ilich Tchaikovsky y más tarde con Los Pinos de Roma de Ottorino Respighi, obras que incitan al mayor entusiasmo de las agrupaciones orquestales del mundo, y que tanto se ovacionaron en la temporada de conciertos de 2015.

Con poco más de 10 años al frente Armando Vargas dejó su entusiasmo y disciplina en la presentación de famosas obras líricas en concierto, óperas escenificadas que conquistaron al público hidalguense, es el Barbero de Sevilla de Gioachino Rossini una de tantas puestas que no se olvidan.

Los últimos seis años estuvieron a cargo del joven director francés Gaétan Kuchta, quien junto con la Orquesta comenzó una nueva etapa, en la que la misión fue acrecentar el valor cultural que una agrupación sinfónica representa al ser creada desde el interior de una Universidad; y así logró ocupar un lugar en el corazón de sus seguidores con la encomienda de diversificar su programación, logrando experiencias sinfónicas de todos los géneros.

La esencia del líder, del que lleva la batuta se lució con la participación de directoras y directores huéspedes de todas las latitudes: Darrell Ang (Singapur), Marlon Chen (Taiwán), Christian Vásquez y Victoria Sánchez (Venezuela), Nisan Ak, (Turquía), Mark Kadin (Ucrania), Matteo Parmeggiani (Italia), Dmitri Orlov (Rusia), Raúl Miguel Rodríguez y Marc Moncusí (España), entre otros. Se compartió el escenario también con directores de cuna mexicana como Enrique Bátiz, Iván López Reynoso, Rodrigo Macías y Gina Enríquez.

Las noches de Orquesta no hubiesen sido una maravilla sin el talento de prestigiados artistas de talla internacional como: Anna Göckel, Fabrice Millisher y Julie Sevilla (Francia) Goran Filipec (Croacia), Ilya Yakushev (Rusia), Gianluca Littera y Cristiano Burato (Italia), Adrián Justus, Horacio Franco, Erika Dobosiewicz, Mauricio Haneine, Rodolfo Ritter, Fernando Saint Martín (México) y Kristina Fejes (Hungría), entre otros.

Y fue en febrero de 2018, cuando se empacaron las maletas para viajar al corazón latino de Colombia y sus ciudades: Medellín, Bogotá y Cali, en donde se sintió el abrazo de la gente y el aplauso de pie después de la interpretación de un repertorio mexicano en el que no podía faltar el Huapango de José Pablo Moncayo, y que cerró con broche de oro con el canto a la vida de “Colombia Tierra querida”, de Juan Carlos Coronel y lucho Bermúdez, que puso a bailar al público en un ambiente de armonía y alegría.

Lo que sí es un hecho es que la aventura continúa con boleto de avión o sin él, la Orquesta seguirá consintiendo a su público con los conciertos que al día de hoy se ha convertido en una tradición: el Mexicanísimo, la Pijamada sinfónica, y la Calaverita Sinfónica para día de muertos, son algunas razones para seguir asistiendo en familia, sin importar que poco o nada sepamos de música sinfónica y sus grandes genios como: Mahler, Beethoven o Mozart, es justamente el primer acercamiento a lo que después será la apreciación de las grandes obras sinfónicas de todos los tiempos.

Tras 25 años la OSUAEH da vuelta a la página de ese libro que tantas noches de orquesta describe, de ese tesoro de emociones que acumula día con día la razón de ser y existir de la agrupación.

Con el concierto “Sinfónica de película” un especial de bandas sonoras, bajo la dirección del maestro Edgar Gutiérrez, director huésped, la OSUAEH celebró su 25 aniversario el pasado 26 de agosto en el marco de la inauguración de la Feria Universitaria del Libro en su edición 35 en el Polifórum “Carlos Martínez Balmori”.

Fue un encuentro con la obra de los grandes compositores de la música de cine, Alan Silvestri con The Avengers, Hans Zimmer con Gladiador y John Williams con Harry Potter y Star Wars, nos llevaron a otras galaxias a través de los sonidos de su música, ante cientos de personas que se dieron cita para vivir la experiencia.

Y entre aplausos y ovaciones la OSUAEH se prepara para comenzar un nuevo ciclo con la elección de quién será el nuevo director artístico de la máxima embajadora cultural de la UAEH.

Si de algo estamos seguros es que no hay límites cuando se ama lo que se hace, la OSUAEH se declara lista para continuar con su segunda temporada de conciertos 2022, queda prohibido quedarse con las ganas de sentir de cerca la emoción de un concierto en vivo.

“Somos capaces de transformar cada pieza en una emoción musical, de hacer sentir el significado de un momento, ese que te lleva a lo desconocido, donde se encuentra la verdadera expresión de la vida y la humanidad”.